También le gustará
Si te interesa la cultura catalana, continúa tu viaje… La oportunidad de descubrir el patrimonio cultural y la historia que han formado las tierras catalanas.
Ajouter aux favoris
Cataluña, tierra de contrastes y riqueza cultural, ha sido siempre un crisol de intercambios y mezclas étnicas. Desde la antigüedad se sucedieron griegos, romanos, íberos, visigodos, moros y carolingios para formar este suelo fértil propicio para la cultura catalana.
la sardana es el baile tradicional de Cataluña. Se baila en círculo alternando entre hombre y mujer tomados de la mano. Las sardanas están orquestadas por una formación musical denominada Cobla.
La Cobla es un conjunto instrumental tradicional formado por un flabiol, un pandero (tamborí), dos tibles, dos tenores, dos o tres trompetas, un trombón de corredera o de válvulas, dos fiscornios y un contrabajo (vera) de tres cuerdas. La Cobla orquesta el baile tradicional catalán: la sardana.
El Castells (“castillo” en catalán) o Castellers es una manifestación cultural tradicional que consiste en construir una pirámide humana de seis a diez plantas con una forma y organización bien definida.
Los Gigantes se llevan Gigantes. La estructura de varios metros de madera o metal descansa sobre los hombros y la cabeza del portador. Representan a personas importantes o representativas de un pueblo. Los Gigantes desfilan por los pueblos mientras giran sobre sí mismos. Luego se reúnen en una gran plaza para bailar en pareja por su cuenta. sardana puntuado por Cobla.
la fiesta mayor es la fiesta patronal del pueblo. Se realizan todos los años en todos los pueblos.
El fin de semana anterior al 23 de junio, una comitiva de cada pueblo sube a lo alto del Canigó con un fardo de leña que lleva el nombre del pueblo. Se colocará al pie de la cruz para la quema del pico la semana siguiente.
El 22 de junio una comitiva sube al Pic du Canigó para la vigilia. El fuego se enciende en la parte superior con la llama traída desde Castillet de Perpignan. La pequeña llama se transforma en un instante en un gran fuego que ilumina el cielo del Rosellón. Los caminantes descienden durante el día 23 de junio para llevar la llama al pueblo. Se utilizará para encender el fuego de San Juan. En el Col d'Ares se produce un relevo entre los países catalanes.
La tarde del 23 de junio, en cada pueblo de los Pirineos Orientales, se celebra el solsticio de verano. Al caer la noche, prendemos fuego a una hoguera, luego bailamos la sardana y degustamos carnes a la brasa y repostería con vino dulce. También intercambiamos ramos de amuletos de Saint-Jean del año y echamos en la chimenea el del año anterior.